EL ALCOHOL ME QUITABA EL MIEDO

Confesiones de un Alcohólico

 EL ALCOHOL ME QUITABA EL MIEDO

/Por Esteban Durán Acosta/

Primer contacto con el alcohol y sus efectos

“Mi primer contacto fue muy joven, creo en la secundaria, cuando empieza la rebeldía, cuando andas buscando el sentido de pertenencia; en primera instancia, pues yo no quería, pero como te juntas con el grupito por quedar bien o por no decir que no, pues agarras esa primera copa y después de eso vienen muchas más”.

Fue el primer comentario de Beba, quien radica en el noreste de la República Mexicana, ante la pregunta de cómo fue su primer acercamiento con el alcohol.
Y agrega que ahora entiende que alcohol es un desinhibidor: “yo era una persona tímida, antisociable, buscaba ese sentido de pertenencia para sentirme bien, porque con el grupo de personas que estaba me aceptaban al ser igual que ellos o al andar igual, imitándolos, entonces me hacía sentir bien, me hacía sentir más valiente, el consumir alcohol te quita el miedo, la pena, te hace relacionarte más”.

¿Qué le decían sus padres al ver su manera de beber?

Sobre este tema, nos dice que lamentablemente eran de bajos recursos: “Como vengo de una familia desintegrada, mi mamá trabajaba para sacarnos adelante, entonces no se daba cuenta y pues yo me las ingeniaba para que ella no se diera cuenta, por ejemplo trataba de llegar a la hora que ella no estaba y de esta manera no me viera u oliera mi aliento a alcohol”.
Nuestra entrevistada confiesa que inició primero a beber una copa y aunque dice que no le gustaba al principio, porque le sabía feo, después se convirtieron en dos, luego, tres y así sucesivamente; primero fue para acompañar.

“Ya después fue para que me aceptaran en el círculo en el que me rodeaba y buscando eso, pues que mi mamá no se diera cuenta, para que no me llamara la atención o no hubiera el castigo, cuando se dio cuenta, pues sí fue un poco más estricta en controlarme las entradas y las salidas, aunque después que empezó mi etapa de bebedora muy fuerte, ya estaba yo un poco más grande, ya era independiente, ya no dependía tanto de mi madre”.

Efectos y consecuencias en la escuela o trabajo

Con el paso de los años y a medida que incrementaba su forma de beber, las consecuencias no se hicieron esperar; las ausencias en el trabaja fueron más frecuentes o llegaba siempre muy tarde. Comenta que tenía un negocio propio, pero su alcoholismo no le permitió atenderlo como debiera : “fue una etapa de bebedora y pues pierdes, no tuve una empresa como tal y las pérdidas fueron grandes, nunca tuve”, reconoció.

¿Cómo llegó a AA?

Afortunadamente, para Beba, hubo una persona que le comenzó a platicar de estas agrupaciones de Alcohólico Anónimos, de lo que ahí se veía, al principio, como todo, no quería aceptar su problema y como nos lo platica ella misma: “pensaba que yo sola podía, que iba a poder, que no necesitaba a nadie, pero finalmente tomé la decisión, porque hay un grupo cerca y tomé la decisión; dos, tres veces pasé por ahí, yo veía cerrado andaba buscando con ganas de no encontrar, hasta que ya decidí entrar a ese grupo y ahí fue donde cambió mi vida”.

¿Cómo le cambió la vida?

Finalmente, como en todas estas historias, hubo un final feliz para Beba, como ella misma nos lo dice: “En primera instancia, el no tener este contacto con el alcohol, pues te hace tomar mejores decisiones, después de haber dejado de tomar se batalla un poco al principio, pero después sientes que hay una vida diferente”.
Y continúa con su relato: “cuando decides dejar el alcohol te das cuenta que puedes convivir, el mundo allá afuera sigue igual, el que cambies o no es personal, debes de pensar las cosas que pasan conscientes de la realidad de la familia y es una nueva manera de vivir, podemos platicar con personas que tomen alcohol, no tenemos nada en contra de ellos, ni de quién venda, ni quien fabrique el alcohol, simplemente, pues el día de hoy nosotros no tomamos nada que contenga alcohol#.

Alcohólicos Anónimos, Sección México,

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