- “Parte del juego es enfrentarnos contra quien nos pongan, entonces bienvenidos todos los extranjeros. Todos son bancos triple A, no son ‘patitos’, pero una vez dicho eso, bienvenidos, pero no nos da miedo”, sostuvo el director general del Grupo Financiero Banorte, Marcos Ramírez Miguel
/Por Adriana Urrea-Pasaporte Informativo/
Las condiciones económicas favorables de México en medio de la turbulencia global atraen a empresas de todo el mundo, y en consecuencia los bancos de sus países empiezan a llegar a territorio nacional, lo cual es una buena noticia que no preocupa a Banorte.
“No nos dan miedo los bancos extranjeros, el que lleguen nuevos participantes habla bien de que México es un país donde quieren estar y de que hay una regulación que te permite entrar”, señaló el director general del Grupo Financiero Banorte, Marcos Ramírez Miguel.
En entrevista, previo a la 79 Convención Bancaria que se llevará a cabo esta semana en Acapulco, Guerrero, el directivo manifestó su confianza porque la institución conoce mejor a sus clientes, detectan sus necesidades y los tienen mejor ubicados, lo que les permitirá retenerlos.
“Parte del juego es enfrentarnos contra quien nos pongan, entonces bienvenidos todos los extranjeros. Todos son bancos triple A, no son ‘patitos’, pero una vez dicho eso, bienvenidos, pero no nos da miedo”, sostuvo.
Refirió que en el año 2000, cuando llegaron las firmas internacionales, Banorte era un banco pequeño y ahora es el más grande no extranjero, “y les seguimos dando lata y seguirán oyendo de nosotros fuerte”.
Explicó que su optimismo se sustenta en que hay una baja penetración de la banca en el país, lo que les permite crecer en más lugares y atender a más clientes, además de que la población mexicana, a diferencia de otros países, está conformada por muchos jóvenes que se incorporan a la fuerza laboral.
“Esos dos elementos nos hacen muy optimistas en que el pastel ya es diferente. Lo que necesitamos es trabajar mucho en educación financiera, aunque hemos trabajado mucho con la autoridad y estamos bastante bien coordinados, lo que necesitamos es ir promoviendo la cultura del ahorro”, argumentó.
Sin embargo, consideró que la autoridad debe aplicar buenas reglas para trabajar todos, y aplaudió que este año en el sector en general “no estamos boca abajo y viendo qué pasó, estamos viendo hacia delante, cómo mejoramos para ser los mejores de la cuadra, lo que no pasaba antes”.
Ramírez Miguel manifestó que a pesar de que esta institución financiera ajustó su estimado de crecimiento económico para el presente año, de 2.8 a 2.2 por ciento, es un crecimiento positivo y realista, cuando otros países decrecerán y no tienen economías sanas como la mexicana.
“Lo que nos toca este año es crecer 2.2 por ciento y seguir trabajando para que 2017 y 2018 lleguemos a los niveles que queremos y eventualmente llegar a 4.0 por ciento”, afirmó.
Consideró que si bien las medidas fiscales y monetarias aplicadas por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) y el Banco de México (Banxico) fueron dolorosas, también eran necesarias y fortalecen el marco macroeconómico respecto a otras naciones.
Ese anuncio coordinado entre las autoridades financieras es algo “normal” para los mexicanos, pero es muy valorado por la comunidad internacional, porque habla de la comunicación y coordinación entre dichas entidades, dijo.
En ese sentido, “hay que cuidar que todo se siga haciendo bien y que no se nos desbarajuste más; que eso duele, sí, vaya que sí duele, pero México lo tiene qué hacer”, expresó.
Ramírez Miguel detalló que el estimado de crecimiento para el crédito se basa no sólo en los resultados que tuvieron los bancos durante el año pasado, sino también lo que traen en “la tubería”, donde observan cosas apetecibles para el sector y eso les permite anticipar un alto crecimiento, muy por arriba de la economía.
