5 ACTIVIDADES QUE AMARÁS DE ACAPULCO EN SEMANA SANTA
/Pasaporte Informativo/
Acapulco atrae a sus visitantes por sus hermosas playas e inolvidables atardeceres. Sin embargo, este puerto guerrerense es más que eso, y tiene mucho que ofrecer.
Diversión, aventura, exquisita gastronomía y una infinidad de eventos y actividades para toda la familia, son parte de este destino que vibra los 365 días del año.
Para que disfrutes al máximo tus vacaciones en este destino te damos las siguientes recomendaciones:
1. Disfruta de un espectáculo de fuego en La Quebrada
Con una historia de 88 años, los clavadistas de La Quebrada ofrecen un nuevo espectáculo lleno de valor y audacia en el que se lanzan al aire como verdaderas teas humanas.
No te pierdas de este acontecimiento nocturno, en el que los experimentados deportistas, envueltos en fuego, se arrojan desde un acantilado de más 40 metros de altura, en la histórica zona turística conocida como La Quebrada.
Este acto, cargado de adrenalina y emoción, considerado Patrimonio Cultural del estado de Guerrero, culmina al ver cumplida la hazaña del clavadista que se sumerge en un canal de siete metros de ancho y cuatro metros de profundidad.
2. Vive días llenos de paz y descanso en el Jardín Secreto Centro Holístico
En Acapulco también podrás encontrar paz y descanso, mientras te conectas contigo mismo y disfrutas de la naturaleza.
Rodeado de vegetación, bambúes de más de dos metros de altura, una gran variedad de orquídeas y bajo la sombra de las palmeras, el Jardín Secreto Centro Holístico es un nuevo resort, ubicado muy cerca de la playa Bonfil.
En este centro de bienestar y sanación, que hace honor a su nombre, al encontrarse escondido y lejos del estrés de la ciudad, tendrás la opción de hospedarte en cabañas y villas ecológicas hechas de bambú, todo esto envuelto en un ambiente muy bohemio.
Este complejo holístico imparte clases de yoga, organiza sesiones de meditación y retiros energéticos de fin de semana. Puedes ser partícipe de una ceremonia de cacao o un ritual de fuego, y crear tu propio mandala en uno de sus talleres de bienestar.
Además, podrás disfrutar de los beneficios del temazcal y de la terapia de sonidos para armonizar tu energía.
3. Tour en la laguna Tres Palos
Cerca del aeropuerto de Acapulco, la laguna de Tres Palos es una belleza natural exótica en la que predominan los manglares y la vegetación de selva baja.
Sus canales de agua dulce, que se extienden a los largo de 15 kilómetros, es hogar de un gran número de especies de flora y fauna, entre los que destacan grandes colonias de pelícanos blancos, patos, garzas, iguanas y cocodrilos, entre otros.
Olvídate del estrés citadino y disfruta de los beneficios naturales de este sitio, entre los que destacan el uso del barro que hay en el fondo de la laguna y que, aseguran sus habitantes, tiene propiedades purificantes y exfoliantes. Lo puedes aplicar como mascarilla para obtener una piel tersa y radiante.
4. Descubre la historia del Fuerte de San Diego
Conocer Acapulco no sólo es bañarse en sus playas, por ello te recomendamos que te des un chapuzón en su historia y visites el Fuerte de San Diego.
Este monumento histórico-cultural, construido en 1616, es considerado la fortaleza marítima más importante del Pacífico, que representó un papel de relevancia en la defensa y comercio de México.
Actualmente es un museo y cuenta con 13 salas de exposición y una hermosa vista a la bahía.
5. Liberación de tortugas
Una vivencia memorable es la liberación de tortugas, que nos vuelve seres privilegiados al observar a tan increíbles animales, que al cabo de 15 años regresan a desovar a la misma playa que los vio nacer.
Esta actividad propia para toda la familia provoca un gran enriquecimiento personal y nos transforma en testigos de la conservación y cuidado del medio ambiente y de los recursos naturales.
Cerca de la Laguna de Tres Palos, en la playa de Barra Vieja, encontrarás diversas organizaciones sin fines de lucro que preparan expediciones de liberación y te permiten conocer más sobre esta increíble especie en peligro de extinción.
