lunes, noviembre 25, 2024 - 1:55 pm

AMLO FRANKENSTEIN

CARTAS DESDE CHICAGO

AMLO FRANKENSTEIN

/Rogelio Faz/

Quien no habrá visto y oído películas o series de Frankenstein. Se podría decir que ya había dejado de tener vigencia en el mundo del entretenimiento. Sin embargo, surge una nueva versión, pero ésta en la política mexicana. ¿Melodrama, tragicomedia, ciencia ficción o terror?  

La novela original de estilo gótico escrita por la inglesa Mary Shelley en el siglo XIX; conjuga ciencia ficción y terror, acorde a los misterios de la vida y el conocimiento científico de la época. La autora mezcla leyenda, creencias, ambición, maldad e incredulidad.

Frankenstein

El personaje de la novela llamado Víctor Frankenstein, es un estudiante de medicina frustrado que crea al monstruo, y se toma atribuciones de Dios al dar vida y desafía a la naturaleza.

Para eso une partes de diferentes cadáveres y crea un humanoide abominable y peligroso, el monstruo.  

Frankenstein, también llamado ‘el moderno Prometeo’ (Prometeo en la mitología griega es el Titán amigo de los mortales, que roba el fuego de los dioses para darlo a los hombres, por lo que será condenado a vivir encadenado).  

El monstruo tiene el cerebro de un criminal consciente de su situación; con sentimientos, rencores y sed de venganza al saber su origen y su suerte. Por lo que se vuelve contra todo lo que le rodea incluyendo a su creador.

Obra literaria y realidad

El propósito de este comentario no es para calificar la obra literaria o si Mary Shelley merece un Oscar. Es para tener una idea de cuando se abusa de la ciencia, la moral y la ignorancia, y las consecuencias que acarrea en un mundo real.      

La obra se centra en la falta de ética en la ciencia y ambición de poder durante la naciente sociedad moderna, ávida de experimentos, y Víctor es el omnipotente Prometeo, que pretende llenar ese espacio como un titán.

Moral científica y económica

Víctor Frankenstein utilizo la electricidad para revivir a un cadáver –de varios-, una energía poco entendida en esos años. Que muchos aceptaron como una posibilidad real. De hecho, lo es, como sucede con la desfibrilación eléctrica (choque eléctrico al corazón para ‘volver’ a alguien a la vida), pero no ‘fabricando’ un cuerpo humano con partes diferentes, al menos no todavía, que no sean los trasplantes de órganos que ya conocemos.

Algo similar sucede con los cambios sociales y sus sistemas de gobierno, donde no faltan los experimentos de los médicos de la moral política. Que hacen con la credulidad popular su servicio social.

Dotados por ese derecho que dicen tener los iluminados; gurús de la verdad, de lo bueno, la justicia, dones que solo tienen los titanes como intermediarios entre Dios y los humanos, como Prometeo.

Cabe señala que, al monstruo, que se le conoce como Frankenstein, en realidad no tiene nombre. Que bien podría ser King Kong, Godzilla, T-Rex o un tigre. Que sueltos atacaran a quien sea.

Política moral

La obra Frankenstein es escrita al inicio de la revolución industrial junto a experimentos científicos y ambos provocaron cambios sociales.

Es cuando surgieron los nuevos demagogos que se debaten entre lo terrenal y lo divino, los únicos que distinguen entre el bien y el mal, por lo tanto, creadores de un nuevo concepto de vida u orden social.

Frankenstein reta a la naturaleza y utiliza a la ciencia para dar vida durante el naciente capitalismo salvaje, que no respeta la dignidad del ser humano de acuerdo a los puritanos de la política científica.

De hecho, la rebelión del monstruo, es consecuencia del uso irresponsable de la ética científica y de la moral. No por nada Víctor tenía a su creación con grilletes y cadenas.

Amlo Frankenstein

En México, el presidente Andrés Manuel López Obrador (Víctor Frankenstein) a creador un engendro: una sociedad resentida con ansias de venganza, que ya no podrá ser controlada ni por su creador, del que él mismo se arrepentirá y tratará de huir como Víctor del monstruo, pero será en balde: el monstruo –o tigre- ya anda suelta.

AMLO ha creado ese engendro de odio en la sociedad y lo azuza a su favor, y el monstruoconsciente de su malformación y su suerte buscará venganza.

Lo que empieza como un ajuste de ideología románticas, de justicia social, termina como una novela trágica que no tiene nada de comedia y mucho de terror. Una leyenda que ya no tiene vigencia en los nuevos cambios sociales, sin embargo, revive.   

[email protected]

POST RELACIONADOS

Nuevos post