CARTAS DESDE CHICAGO
MIGRACION
ENTRE REALIDADES VIRTUALES
/Rogelio Faz/
Mucho se debate sobre la problemática migratoria del sur hacia el norte: Estados Unidos, un tema ya demasiado politizado. Sin embargo, era tema a discusión mucho antes de las recientes separaciones de menores en la frontera.
Para quienes tuvimos a un familiar viviendo en EU estando allá (México), por los años 40 o 50 del siglo pasado, por lo regular papás o abuelos dejaban a las familias atrás, de esos que se iban a probar suerte al ‘otro lado’. El ir y venir era una virtual separación familiar; necesidad, aventura y riesgo.
Entre sus crónicas peligrosas y graciosas reconocían que el cruzar la frontera sin papeles no era permitido, no había muchos de ellos en las grandes ciudades como en Chicago. Dicen, que cuando se encontraban por las calles del ‘downtown’ que, sin conocerse, se paraban para conversar, a preguntarse cosas tan simples como ¿de dónde eres? ¿dónde trabajas? Ahora no se da un paso sin encontrar a un paisa, la indiferencia es una muestra del cambio.
La mayoría de ellos se resistía traer a la familia porque EU era ‘libertino’, además para no exponernos a los mismos riesgos de ellos, pues existía la posibilidad de ser deportados. Eso no ha cambiado.
Las redadas estaban presentes en fábricas o paradas de autobús, cuando la migra tocaba a las puertas de las casas no era nada extraño. Era por denuncia de un compañero de trabajo enemistado.
Hoy día, ha cambiado completamente el concepto de ser inmigrante. Se llega abiertamente a la frontera para pedir asilo o refugio con argumentos que, para aquel entonces ni sonando hubieran sido aceptados: violencia doméstica, escapando del pandillerismo o simplemente buscando una mejor vida. Ahora en su mayoría son familias o mujeres con sus hijos y viniendo de más lejos.
Las subsecuentes generaciones de inmigrantes al conocer el “caminito” fuimos perdiendo el miedo, y ante el incremento de obstáculos para cruzar como el muro, decidimos traernos a la familia. Es de suponer que el volumen de inmigrantes, los descendientes y el tiempo han hecho su trabajo. Emigrar ya no es una alternativa de probar suerte, lo hemos convertido en un derecho.
Idea que no comparte la administración de Donald Trump, como no lo hicieron las anteriores. Salvo la iniciativa privada a través de las diferentes industrias que se veía beneficiada con la mano de obra barata. A ambos nos pasaron la factura.
Decimos estar muy orgullosos de nuestra tierra, pero regresar a ir vivir al sur, para la gran mayoría se ve como una posibilidad muy lejana, no tanto por el vínculo familiar que pudiéramos dejar aquí (EU), sino al rechazo de vivir allá. Pues salimos huyendo de nosotros mismos y seria como regresar al pasado.
Ahora que en México se anuncia el advenimiento de la cuarta transformación del país, con el virtual gobierno electo, tampoco es una opción muy convincente ni para aquellos que férreamente apoyaban el cambio.
El cuento de que ya no conozco a nadie allá y mis hijos no hablan el idioma, contradice la excusa cuando de allá pa’ca no fue un impedimento para venirnos.
Los del norte no pretenden cambian ni un ápice de su política inmigratoria, y quedo de manifiesto en la reunión que sostuvieron los representantes del gobierno estadounidense en México con el virtual futuro gobierno, pues no trataron el tema del muro.
Lo que podría ser un mal indicador, pues el virtual secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, dijo tajantemente que no se abordó el tema. Es decir, Trump nuevamente impuso su agenda en territorio mexicano como lo hizo con el virtual expresidente Enrique Peña Nieto. ¿Debilidad, temor o cautela del virtual gobierno electo que ya de hecho gobierna?
El tema no está a discusión para el gobierno estadounidense. La migra seguirá haciendo su trabajo, y los migrantes independientemente cuales sean las razones para emigrar y cuales sean los gobiernos, los sin papeles seguiremos siendo deportables, una realidad virtual.