CARTAS DESDE CHICAGO
Esclavos modernos por…
/Rogelio Faz/
/Rogelio Faz/
La semana pasada murió un mexicano a consecuencia de insolación en el estado de Washington, prácticamente en condiciones de esclavismo. Era trabajador huésped con visa agrícola (vencida). La respuesta tanto de la representación consular mexicana, como los medios de comunicación en México, o “hispanos” en Estados Unidos, hicieron caso omisión. Hasta que el programa Sin Censura con Vicente Serrano transmitiendo desde Chicago, lo expuso insistentemente.
La historia americana de justicia no acaba por cuajar. Los que venimos a la tierra de las oportunidades también es con la esperanza de encontrar justicia y libertad. Pero tal parece es dependiendo de las circunstancias, raza y origen.
Cuando las cosas no nos favorecen, decimos que los anglosajones vinieron a usurpar estas tierras. Que es una verdad histórica que no cambia nuestra realidad. No obstante, si no hubiera sido así probablemente no estaríamos aquí.
Ahora estamos cosechando lo bueno y lo malo de esos colonos que se independizaron de la Corona Británica, que crearon la tierra de las oportunidades, dando lugar a que llegaran hordas de inmigrantes europeos en masa en busca de oportunidades. Se presume que más de la mitad de los inmigrantes blancos durante los siglos XVIII y XIX llegaron como ‘sirvientes’. Una versión light de esclavo. Su descendencia ahora se enfrenta entre si como sucedió durante el rally en Charlottesville, Virginia.
Sin embargo, para ser lo que es este país paso por una guerra civil para enfrentar un problema: la esclavitud. Una situación que resolvieron temporalmente admitiendo la existencia de estados esclavistas en el ‘sur profundo’. Que después Abraham Lincoln aboliría. Bueno, aparentemente, pues sigue siendo un reto.
Durante esa travesía histórica quedaron registrados varios eventos que caben destacar. Como cuando un servant (sirviente) negro; llamado John Casor, se convirtió en el primer esclavo oficialmente registrado en la América colonial. Para este esclavo su dueño era otro negro: Anthony Johnson. un servant liberto, que lo había mantenido más tiempo de lo establecido. Johnson se vio presionado a liberar al esclavo, pero apelo el caso. Y la corte falló a su favor declarando que se le estaba privando al esclavo de su legítimo dueño, que era «de por vida». Johnson tuvo otros 4 sirvientes, y eran blancos.
Hay otro antecedente: varias tribus indio americanas; también tuvieron a sus esclavos, incluso algunos apoyaban a estados esclavistas.
Los latinoamericanos mestizos no contribuimos en nada para eso; que no haya sido al sometimiento involuntario con la perdida de territorio u ocupación. Bueno, uno que otro tejano-mexicano.
Con todo, las oportunidades se siguen dando en EU, de lo contrario no seguiríamos llegando. Pues bien, ya es hora de ubicarnos en tiempo y lugar para asimilar nuestro rol, como protagonistas de la nueva generación de “americanous”, y no como esclavos modernos.
Pero primero saquemos nuestras propias conclusiones: No llegamos aquí (EU), para defender a los indios americanos o a los afroamericanos, nuestra presencia obedece al mundo creado por los anglosajones. Solo nos falta salir de nuestra propia esclavitud superándonos. Cosechando las oportunidades que da este país a pesar de nuestras desventajas; condicionadas a conveniencias políticas o a nuestra idiosincrasia, de lo contrario difícilmente disfrutaremos de la libertad, sino es que entenderla. Y es que la ignorancia y la indiferencia son hermanas de la injustica. Una verdad que duele y ofende.
La historia americana de justicia no acaba por cuajar. Los que venimos a la tierra de las oportunidades también es con la esperanza de encontrar justicia y libertad. Pero tal parece es dependiendo de las circunstancias, raza y origen.
Cuando las cosas no nos favorecen, decimos que los anglosajones vinieron a usurpar estas tierras. Que es una verdad histórica que no cambia nuestra realidad. No obstante, si no hubiera sido así probablemente no estaríamos aquí.
Ahora estamos cosechando lo bueno y lo malo de esos colonos que se independizaron de la Corona Británica, que crearon la tierra de las oportunidades, dando lugar a que llegaran hordas de inmigrantes europeos en masa en busca de oportunidades. Se presume que más de la mitad de los inmigrantes blancos durante los siglos XVIII y XIX llegaron como ‘sirvientes’. Una versión light de esclavo. Su descendencia ahora se enfrenta entre si como sucedió durante el rally en Charlottesville, Virginia.
Sin embargo, para ser lo que es este país paso por una guerra civil para enfrentar un problema: la esclavitud. Una situación que resolvieron temporalmente admitiendo la existencia de estados esclavistas en el ‘sur profundo’. Que después Abraham Lincoln aboliría. Bueno, aparentemente, pues sigue siendo un reto.
Durante esa travesía histórica quedaron registrados varios eventos que caben destacar. Como cuando un servant (sirviente) negro; llamado John Casor, se convirtió en el primer esclavo oficialmente registrado en la América colonial. Para este esclavo su dueño era otro negro: Anthony Johnson. un servant liberto, que lo había mantenido más tiempo de lo establecido. Johnson se vio presionado a liberar al esclavo, pero apelo el caso. Y la corte falló a su favor declarando que se le estaba privando al esclavo de su legítimo dueño, que era «de por vida». Johnson tuvo otros 4 sirvientes, y eran blancos.
Hay otro antecedente: varias tribus indio americanas; también tuvieron a sus esclavos, incluso algunos apoyaban a estados esclavistas.
Los latinoamericanos mestizos no contribuimos en nada para eso; que no haya sido al sometimiento involuntario con la perdida de territorio u ocupación. Bueno, uno que otro tejano-mexicano.
Con todo, las oportunidades se siguen dando en EU, de lo contrario no seguiríamos llegando. Pues bien, ya es hora de ubicarnos en tiempo y lugar para asimilar nuestro rol, como protagonistas de la nueva generación de “americanous”, y no como esclavos modernos.
Pero primero saquemos nuestras propias conclusiones: No llegamos aquí (EU), para defender a los indios americanos o a los afroamericanos, nuestra presencia obedece al mundo creado por los anglosajones. Solo nos falta salir de nuestra propia esclavitud superándonos. Cosechando las oportunidades que da este país a pesar de nuestras desventajas; condicionadas a conveniencias políticas o a nuestra idiosincrasia, de lo contrario difícilmente disfrutaremos de la libertad, sino es que entenderla. Y es que la ignorancia y la indiferencia son hermanas de la injustica. Una verdad que duele y ofende.
