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Una tras otra, el PRI/Sistema abonan a su descrédito y caída

Ahora tocó a Ochoa Reza, Eruviel Ávila y Emilio Gamboa

Por Luis Repper Jaramillo*

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Luis-Repper JaramilloNunca como hoy al PRI se le puede aplicar la frase popular “el hombre es el único animal que siempre tropieza dos veces con la misma piedra” o sea que a pesar de cometer un error, no pasa un día y cae en la misma torpeza. Ejemplos, infinidad: Luis Donaldo Colosio y José Francisco Ruiz Massieu, Humberto Moreira Valdez y Javier Duarte de Ochoa, Tlatlaya y Ayotzinapa, 2 de octubre de 68 (Tlatelolco) y 10 de junio de 72 (Halconazo), nacionalización de la banca y error de diciembre; César Duarte Jáquez y Roberto Borge Angulo, Ciudad Juárez, Chihuahua y Estado de México (feminicidios), y más muchas similitudes más, pero muchas.

Apenas la semana pasada, a estas corrupciones, insensateces, valemadrismos de un dinosaúrico partido, con dinos que se niegan a abandonar sus fechorías y estancia en el poder (porque en él son corruptos, reiterativos y lo peor, impunes) se sumó la prepotencia del Senador por Yucatán y frustrado aspirante (tres veces) a la gubernatura del Estado, Emilio Gamboa Patrón, quien en un alarde de indiferencia, prepotencia, irresponsabilidad y violación a la Ley Ecológica del país, que él y el Congreso aprobaron, en fin de semana de asueto, paseo, solás y esparcimiento –como si lo mereciera por trabajar tanto- a bordo de un helicóptero, junto con dos sujetos más, igualmente irresponsables, aterrizaron la pesada nave en el arrecife coralino Alacranes, zona protegida como reserva ecológica tanto por la PROFEPA como por la UNESCO, para descender y anordar un lujoso yate, que los esperaba metros adelante.

Los tres delincuentes ecológicos, son Emilio Gamboa Patrón, Coordinador del Grupo Parlamentario del PRI, en el Senado, el empresario yucateco, Emilio Díaz Castellanos y el Coordinador de Puertos y Marina Mercante de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), Guillermo Ruiz de Teresa, quienes indiferentes bajaron de la aeronave y subieron alegremente al majestuoso yate, propiedad del priista, aunque para tapar el ojo al macho, atribuyen la pertenencia del navío a Díaz Castellanos… vamos, pero esto no es lo importante.

La verdad desnuda, es que Emilio Gamboa, pretendiendo lavar sus culpas, ordenó a sus testaferros de Comunicación Social del Senado, encabezados por Héctor Lee, emitir ipso facto un boletín de prensa (jajajaja) para justificar que “el Senador sólo era pasajero y por tanto no pudo influir en la decisión del piloto para bajar en el Área Natural Protegida”… pamplinas, mentira, torpeza, porque Gamboa Patrón siendo yucateco, conocedor –creo- de leyes, de su Estado y de las restricciones de invadir terrenos prohibidos, bien sabía que aterrizar ahí era violatorio de la Ley Ecológica, que no argumente cándidamente que desconocía el plan de vuelo y sobre todo el punto de encuentro para conectarse con el yate, en zona restringida.

Es tal la falacia de Gamboa como la tontería de Héctor Lee, en emitir un Comunicado de Prensa, cuando bien sabía que su “jefe” había cometido una violación federal.

Menudo favor le hacen los priistas al sexenio del priista #1, Enrique Peña Nieto, quien un día sí y otro también, comete errores infantiles que sumen en la ignominia, el descrédito, en la burla social a un gobierno fallido, antipopular y mentiroso.

No vamos lejos, una semana antes de la tontería de Gamboa Patrón, el Presidente nacional de PRI, Enrique Ochoa Reza, había cometido una desvergüenza al aceptar una liquidación laboral de la CFE, por sólo 2 años de trabajo y “renuncia voluntaria”, de 1 millón 260 mil pesos, finiquito legal, pero inmoral, por lo elevado del monto. Peña, calló, con lo que justificó el insultante bono, por la sencilla razón que Ochoa Reza es su amigo, su cuate, su primer círculo.

Este mismo torpe dirigente nacional del partido en el poder, en sus periplos por el país, visitó el Estado de Coahuila, en donde los hermanos corruptos Humberto y Rubén Moreira Valdez, hacen el 1, 2, para saquear y cuidarse las espaldas, por las acciones de saqueo, robo, defraudación y corrupción, en contra del erario público.

Ochoa Reza fue hasta Saltillo, para abrazar, proteger, blindar a Rubén, quien es acusado y demandado por los coahuilenses de encubrimiento y desvío de recursos públicos para pagar millones de pesos a empresas “fantasma”, por supuestas asesorías o productos consumibles.  A su vez, Rubén, resguarda, atesora, vigila y usufructúa los dineros malhabidos que su hermano Humberto, hurtó, dilapidó de la Hacienda pública cuando fue gobernador.

Y para rematar las pende… de este líder nacional priista, para restregar a los mexicanos, a los coahuilenses, al propio Peña Nieto y marcar el sello de corrupción e impunidad que se ejerce en el PRI, nombró en su primer círculo del CEN, a la Dip. Carolina Viggiano, Secretaria Jurídica, no sería anormal, salvo que esta abogada es nada menos esposa de Rubén Moreira Valdez, gobernador de Coahuila, quien tiene cuentas pendientes con la justicia. Carolina fue ubicada en sitio estratégico para defender a su cónyuge. O sea juez y parte, ¿en donde está la ética, la moral y la aplicación de la Ley Anticorrupción?, en el PRI no se aplican esta virtudes.

De todos estos casos Peña Nieto está enterado, sin embargo sus múltiples problemas nacionales, internacionales, personales, familiares, de imagen, credibilidad, de aceptación popular, desatinos y de falta de “decisiones”, le imposibilitan moralmente para dar el manotazo en la mesa y poner orden… bueno, cómo poner orden, cuando en lo personal y público vive una crisis de autoridad y de gobierno.

El PRI por sus propias acciones se le conoce. No hay control de nada; ahora Ochoa Reza quiere convencernos, con el petate del muerto, que no aceptará corrupción ni impunidad, y como el pez por su propia boca muere, Ochoa fue a validar lo antisocial e inmoral a Coahuila, mientras en Quintana Roo, Veracruz y el saliente de Chihuahua, nadan de apachito en la boñiga de la corrupción, la burla, la impunidad y la dejadez oficial. Ya se fue un pez gordo, Duarte Jáquez, a punto está de huir Borge Angulo; a Javier Duarte –dicen- ya le tendieron la cama para detenerlo, una vez que pierda el fuero como gobernador de Veracruz… pero… Enrique Ochoa, “una golondrina no hace verano”, no basta con liquidar al jarocho Duarte, ¿qué pasa con Humberto Moreira, Arturo Montiel, Carlos Salinas de Gortari, Ulises Ruiz, Fidel Herrera, Eruviel Ávila. Éste, sólo para la publicidad de su 5º Informe de Gobierno, en el Estado de México, dilapidó 779 millones de pesos, en un mes, del erario de los mexiquenses. Si esto no es corrupción, entonces cómo le llamas.

No olvides, por la parte que le corresponde al PRI, sancionar a Emilio Gamboa Patrón, tu líder en el Senado, por corrupción, simulación (no me digas que un millonario, un funcionario de la SCT y tu yucateco frustrado, vacacionaron sólo por el placer de viajar), algo maquinaron en alta mar. Pronto lo sabremos cuando haya actividad de licitaciones en puertos, aeropuertos, caminos, etc. De esto la autoridad tiene la obligación legal, moral y ética de descubrirlo; de castigar al senadorsucho y demostrar a los mexicanos que hay moral y ética para sancionar a los violadores de leyes… ¡¡Escucha Emilio!!

Una vez más quedó demostrado que las redes sociales son más aptas, inteligentes y contundentes que la autoridad federal. Si no hubiese estado en el Área Natural Protegida, Alacranes, una persona con su celular y videograbar la insultante escena de Gamboa y coacusados, esto no hubiese trascendido. La sociedad está harta, hasta la madre, de las impunidades de los funcionarios, en este caso del legislador priista, que de inmediato lo subio a la Red y se viralizó.

Ya alguna vez, el insensato nuevo gobernador del Estado de Hidalgo, Omar Fayad, en su papel de Senador del PRI, pretendió criminalizar a los mexicanos por el uso de la Internet, al proponer una Ley que reglamentaría la utilización de esta herramienta (con el caso Emilio  Gamboa/Alacranes comprendemos) e impedir hacer de las Redes Sociales el verdadero e incorruptible vínculo entre la sociedad y el quehacer público/político; por fortuna la presión social y de los medios de comunicación impidió la tontería de Omar Fayad.

Éstos (celular, Tablet, IPhone, etc.) son  instrumentos populares, que sustituyen la colusión, complicidad, incapacidad, inmoralidad, corrupción, impunidad, indiferencia, de autoridades públicas y burócratas inepto, quienes cometen tropelías, ignoran las peticiones sociales, por lo que jamás deberán someterlas al rigor de una ley, a la que están acostumbrados los servidores públicos violar.

Una vez más, un celular dignamente utilizado desenmascaró aberraciones y actividades ocultas, hoy de una triada tramposa (Gamboa, Díaz Castellanos y Ruiz de Teresa) que algo tramaron, pero fueron descubiertos y denunciados, gracias a la Red Social. Los mexicanos esperamos la acción y efectiva contundencia de la autoridad federal para sancionar al trío de violadores de la zona prohibida.

Así terminan 14 días ominosos para el gobierno de Enrique Peña Nieto, para su partido el PRI y para dos mequetrefes, Ochoa Reza y Gamboa Patrón, que mucho abonaron al desprestigio del Sistema gubernamental, tan necesitado de, al menos un hecho, que impida más su caída y descrédito.

*Miembro de la Academia Nacional de Periodistas de Radio y Televisión (ANPERT) y de Comunicadores por la Unidad (CxU)

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