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Lo que no te debes perder en Guadalajara y la zona conurbada

 

  • Guadalajara, Zapopan, San Pedro Tlaquepaque, Tonalá, El Salto y Tlajomulco de Zúñiga, la gran urbe de Occidente

RedFinancieraMX
México/Especial

Expo-GuadalajaraA México se le conoce mundialmente por su tequila y su mariachi, pero dicho binomio no remiten a la Zona Metropolitana de Guadalajara (ZMG), ya que ambos términos son sinónimos de la bebida y la música por excelencia del estado de Jalisco.

La Zona Metropolitana de Guadalajara, según datos del gobierno del estado de Jalisco, está conformada por 9 municipios, de los cuales 6 son considerados como centrales, es decir municipios que cuentan con una conurbación continua: Guadalajara, Zapopan, San Pedro Tlaquepaque, Tonalá, El Salto y Tlajomulco de Zúñiga, y otros tres: Juanacatlán, Ixtlahuacán de los Membrillos, y Zapotlanejo, a los que se califica como exteriores al no formar parte de su continua mancha urbana.

Pero, más allá del crecimiento poblacional, de su dinamismo económico, su riqueza cultural y artesanía, la Zona Metropolitana de Guadalajara ofrece al paseante, nacional o extranjero, una innumerable cauda de bondades, lugares que descubrir y sitios que rememorar.

Lo más importante es el trato de su gente hacia el vacacionista, ya que despliega calidad y calidez en el trato y hospitalidad.

  • Guadalajara

En Guadalajara hay mucho que ver, como su majestuosa Catedral, cuya construcción inició en 1561 por órdenes del Rey de España Felipe II y consagrada el 12 de Octubre de 1716.

También se puede visitar el ex Convento del Carmen, construcción fundada en el Siglo XVII entre 1687 y 1690, y en cuyas cinco salas se realizan exposiciones de pintura, fotografía o escultura, tanto de artistas locales como extranjeros.

Para los amantes de la cultura, sobresale el Instituto Cultural Cabañas, cuya construcción comenzó en 1805 y abrió sus puertas 5 años después. El inmueble fue diseñado por Manuel Tolsá, conocido arquitecto y escultor español que también hizo la fachada de la Catedral Metropolitana en la Ciudad de México.

También se le conoce como el Hospicio Cabañas porque ahí se asentaron las Hermanas de la Caridad entre 1852 y 1983. Hoy en día cuenta con 23 patios, 106 cuartos, 72 pasillos y 2 capillas que han sido sede de exposiciones de arte contemporáneo nacional e internacional y donde se realizan diversas exposiciones de pintura, escultura, fotografía, cinematografía.

El Teatro Degollado es otra obra arquitectónica de las que puede presumir Guadalajara y de las que nadie puede abstraerse. Inició el 5 de marzo de 1856 y se inauguró 10 años después, con la ópera “Lucia de Lamermoor” y la actuación de “Ángela Peralta” en el papel principal.

  • Zapopan

Famosa por su virgen, cuya imagen original permanece en la Basílica de Nuestra Señora de Zapopan, la cual sólo sale de dicho lugar el 12 de octubre para la célebre Romería. Zapopan es el octavo municipio más poblado de México y el segundo más poblado en el estado de Jalisco.

Tierra de orfebres, alfareros y artesanos, Zapopan ofrece atractivos turísticos como su Arco de ingreso de 20 metros de altura, el cual da acceso al Paseo Teopiltzintli (dios del maíz) y termina en la Plaza de las Américas Juan Pablo II.

Por el Andador 20 de Noviembre, rodeado de comercios, restaurantes, cafés y bares que forman parte de la vida nocturna de la zona.

También se puede visitar la ex hacienda la Magdalena, en el norte de la ciudad, o la ex hacienda Santa Lucía, cuyo casco data de 1545 o la Hacienda La Escoba, donde se albergó la primera fábrica textil de Jalisco. Su acceso es por la carretera a San Cristóbal y a 3 kilómetros se toma el camino a Copolita, donde se recorren aproximadamente 2 kilómetros hasta llegar a la Hacienda, ubicada en la localidad de Tesistán.

Sin duda, la Basílica de Zapopan es la máxima joya arquitectónica de este poblado, cuya construcción fue iniciada por frailes franciscanos en 1690, en honor a la Virgen de la Inmaculada Concepción. De acuerdo con la información oficial del municipio, desde su gran atrio se observan escudos de relieve, columnas jónicas y remates de grandes macetones. El altar principal que resguarda a la Virgen de Zapopan es de mármol de Carrara. Su estilo es dórico colonial, con bóvedas góticas, retablo corintio y fachada de estilo plateresco.

Hay muchos templos para visitar en Zapopan, entre los que se encuentran la Capilla de Nextipac; la Iglesia de la Parroquia de Atemajac; la Iglesia de San Esteban; la Iglesia de San Francisco de Ixcatán; la Iglesia de Santa Ana Tepetitlán; la Parroquia de Tesistán, y el Templo de San Juan de Ocotán, todas construidas entre los siglos XVI y XVII

  • San Pedro Tlaquepaque

Dice la canción popular que Tlaquepaque Pueblito tiene olorosos jarritos, que hacen más rica la birria y el dulce tepache, mientras se escucha la ejecución musical de un buen mariachi. Y es verdad… es una población llena de alfareros y artesanos cuyas obras adornan lo mismo las plazas del Vaticano que residencias en Japón o Alemania.

En este hermoso lugar se puede disfrutar de comida tradicional en El Parián, un típico edificio que caracteriza a San Pedro Tlaquepaque; descansar en el Jardín Hidalgo, con su característico kiosco rodeado entre frescas palmas, fresnos y rosas, y de plano agasajarse hasta con un masaje en el SPA de Casa Armonía, uno de los prestigiados hoteles boutique que se localizan en esta ciudad.

En San Pedro Tlaquepaque usted puede saborear una nieve raspada, mientras presencia diferentes actividades cívicas, religiosas y culturales o admirar las obras que se encuentran en sus numerosas galerías de arte, tiendas artesanales o viejas casonas sobre la calle Independencia.

Existen otros lugares como Centro Cultural el Refugio, que data de 1885; el Museo del Premio Nacional de la Cerámica “Pantaleón Panduro”, que se ubica dentro del Centro Cultural el Refugio, el cual alberga las piezas ganadoras del Premio Nacional de la Cerámica, o bien visitar el Museo Regional de la Cerámica, donde se encuentran las famosas miniaturas del tlaquepaquense Ángel Carranza.

También se puede dar una vuelta por el Santuario de Nuestra Señora de la Soledad, que es la segunda de las dos iglesias más bonitas de la ciudad, la cual presume un estilo colonial y dos torres con cúpulas doradas.

El mercado Benito Juárez es el mejor lugar para buscar tesoros y antigüedades, desde juguetes tallados a mano y máscaras y adornos de todo tipo, hasta instrumentos musicales, sombreros bordados, alfarería diversa. También hay conciertos gratuitos y torneos de ajedrez al aire libre, y luego de observar el trabajo de los artistas en plena calle, puede degustar un delicioso plato de pozole, una sopa tradicional elaborada con maíz, carne y pimientos de chile, o consumir unos boquerones que se sirven calientes con salsa de tomate o salsa. El conocido Tianguis Cultural en Benito Juárez se celebra todos los sábados de 10.30 a 16:00 justo al sur del Parque Agua Azul.

  • Tonalá

Este lugar es, sin duda, la mejor muestra del arte popular mexicano y del ingenio de sus habitantes, que lo mismo trabajan en cerámica, que vidrio soplado, madera metal o plástico.

Por ello no está de más una visita a la Casa de Artesanos, que se fundó en 1988, con el fin de que sus artistas tengan un sitio para reunirse, exponer sus obras, promoverlas y venderlas. La tienda exhibe la producción de más de 50 artesanos especialistas en diferentes técnicas de cerámica.

Es recomendable conocer el Cerro de la Reina o conocido también como cerro del Ombligo, desde el cual se puede admirar la ciudad de Guadalajara, la barranca del río Santiago y la inmensa meseta de los Altos de Jalisco. Este lugar es punto clave para la observación de fenómenos astronómicos como los eclipses de sol y el cometa Halley; en la cima de cerro se encuentra el monumento a la reina Cihualpilli y la capilla de piedra de castilla dedicada a la Virgen de Guadalupe y la bandera más grande del Estado, con un asta bandera que mide 42 metros de altura, con la insignia patria de 20 metros de altura y 11.55 de ancho.

La Parroquia de Santiago Apóstol es otro lugar de Tonalá que no debe dejar de admirar, pues es una de las construcciones sacras más bellas del municipio y del Estado de Jalisco. La construcción del templo comenzó en el siglo XVII y se terminó hasta la segunda mitad del siglo XVIII, lo que provocó que la construcción tenga estilos arquitectónicos diversos.

Asimismo, se ubica en el municipio la antigua capilla del Hospital de la Virgen de la Soledad que fue reconstruida y se convirtió en el actual Santuario, terminado y bendecido en 1899.

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