- La maestra Perla Vázquez Pérez, rectora del Centro de Estudios Superiores Monte Fénix asegura que los jóvenes que han comenzado el camino de las drogas comienzan a perderlo todo, la escuela, su desarrollo y sus posibilidades de futuro en todos los aspectos, incluyendo su propia vida
/Por Felipe Galindo/
Han comenzado a prepararse para enfrentar a las drogas, en su primera etapa estuvieron 6 meses en capacitación. Son 56 jóvenes, entre profesores y líderes sociales que han apostado a hablarle a los jóvenes en su propio lenguaje.
El reto es incrementar la percepción del riesgo real y generar conciencia entre sus pares de la forma en la que afecta el consumo de drogas, estén o no legalizadas.
El proyecto es coordinado y supervisado a detalle por el Centro de Estudios Superiores Monte Fénix en colaboración con la Universidad YMCA.
El escenario no es nada prometedor aunque si un área de oportunidad, sobretodo cuando según la última encuesta que se levantó en 2014 entre estudiantes, habla de que los jóvenes se han iniciado en el consumo de drogas a los 9 años.
La maestra Perla Vázquez Pérez, rectora del Centro de Estudios Superiores Monte Fénix asegura que los jóvenes que han comenzado el camino de las drogas comienzan a perderlo todo, la escuela, su desarrollo y sus posibilidades de futuro en todos los aspectos, incluyendo su propia vida.
«Con este programa estamos buscando llegar a la población juvenil, con jóvenes que ya se capacitaron para compartir lo que han aprendido y lograr que haya estrategias de prevención, nos da mucho gusto generar estas áreas de trabajo en poblaciones de niños y jóvenes en donde comienza el consumo de drogas a los 12, 13 o 15 años o incluso antes».
Este primer programa piloto busca impactar a más de mil 100 jóvenes de la comunidad YMCA de la Ciudad de México y está supervisada por profesionales de la materia tanto de la universidad como de Monte Fénix.
Los primeros resultados se verán en 24 meses que dura el proyecto, que sin duda permitirá ir mejorando la estrategia de largo alcance que se busca en esta guerra contra las drogas desde la prevención, un arma que sin duda traerá cada vez mayores resultados.
Dentro del programa de capacitación para ejército de jóvenes se habla de desarrollar habilidades sociales, y cognitivas, que dicho de otra manera les da herramientas para tener buenas estrategias en su meta de ser asertivos y aprender a rechazar alguna invitación al consumo de alcohol, tabaco o de alguna otra sustancia y eso replicarlo a más jóvenes.
«Daremos un año a la implementación del programa y después volveremos a aplicar las estrategias para revisar cual fue el impacto y revisar si hubo cambios favorables en la disminución de riesgo en el consumo y la disminución del consumo de sustancias y del incremento en la percepción del riesgo en éste», advierte la maestra Gómez.
Independientemente de la legalización o no de cualquier droga los jóvenes deben estar con la suficiente información y argumentación de las consecuencias de su consumo.
La clave es precisamente que a cualquier joven le quede claro que aunque la droga esté a su disposición y cercanía deben tener la seguridad de saber cómo enfrentar la situación. La batalla apenas comienza.