En favor de los Docentes, una mirada a la evaluación

• Reitero: es un gran avance pasar de evaluar la Enseñanza, a evaluar Aprendizaje. Sin embargo, la clave sigue siendo apoyar a los maestros

Por María Teresa Ortuño Gurza
Presidente Ejecutiva de Suma por la Educación

Tenemos pocos años de conocer los resultados de las evaluaciones educativas. Éstas pueden ser aplicadas a Docentes o a Alumnos.

Para los estudiantes, primero se creó la prueba ENLACE (Evaluación Nacional del Logro Académico en Centros Escolares) que era censal, es decir, de aplicación a toda la población escolar en educación Básica y Media Superior. El Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE) la eliminó y creó la prueba PLANEA (Plan Nacional para la Evaluación de los Aprendizajes) que en 2015 se aplicó por primera vez, a alumnos de sexto de primaria y tercero de secundaria.  Se nos dijo que no son comparables ambas pruebas. Sin embargo, son los instrumentos con los que contamos para conocer el aprendizaje de los alumnos en Lenguaje. Y ambas dan cuenta del panorama desolador que tenemos.

Es bien cierto que año con año las cosas van mejorando, pero no a la velocidad ni en la profundidad deseada.

Veamos algunas cifras de resultados de alumnos en la prueba PLANEA, para estudiarlas a la luz de la primera Evaluación de Desempeño Docente, presentadas este 29 de febrero por el Secretario de Educación Pública, Aurelio Nuño.

PLANEA mide dos materias: Lenguaje y comunicación (LyC), y Matemáticas. Mide el logro en cuatro niveles: I insuficiente, II cubre lo indispensable, III satisfactorio, y IV destacado.

Los resultados de la media nacional en sexto de primaria en LyC son: 49.5, 33.2, 14.6 y 2.6. En otras palabras, la mitad de los alumnos está en insuficiente y sólo el 2.6 por ciento tiene una calificación sobresaliente. Para ese mismo grado escolar, Matemáticas arroja lo siguiente: 60.5, 18.9, 13.8 y 6.8. Aquí, es mucho mayor el número de alumnos en el nivel más bajo, pero también en el más alto.

Para tercero de Secundaria, en LyC las cifras de PLANEA nos dicen que en el nivel más bajo están el 29.4 por ciento.  En el nivel II se ubican el 46.0; en el III están el 18.4, y hay un 6.1por ciento en el nivel IV, es decir, destacados. Ese mismo grado escolar, tiene estos resultados en Matemáticas, como promedio nacional:  65.4, 24.0, 7.5 y 3.1.  Es decir, dos terceras partes de estos alumnos se encuentran en el nivel más bajo de aprendizaje.

La fuente para estos datos, está en la página del INEE: http://www.inee.edu.mx/images/stories/2015/planea/final/fasciculos-finales/resultadosPlanea-3011.pdf

Reitero: es un gran avance pasar de evaluar la Enseñanza, a evaluar Aprendizaje. Sin embargo, la clave sigue siendo apoyar a los maestros.  Motivarlos.   Reconocer su función.  Todos hemos repudiado a personas que cobran por ser profesores sin serlo, pero son una ínfima minoría.

Si queremos vencer a la ignorancia y cerrar brechas de desigualdad, necesitamos apoyar a los profesores. Correr a quienes no cumplan con su función.

Los resultados de la Evaluación del Desempeño Docente dan cuenta de que los profesores se ubican más en los niveles III y IV. En Educación Básica, los resultados son: 14.1; 37.6, 40.5 y 7.9 por ciento. En Media Superior, los de nivel insuficiente son 18.5 por ciento; suficiente 31.5; destacados 7.4 y excelente 3 por ciento.

De 3,145 directores evaluados, el 25 por ciento se coloca en el nivel más bajo, el de insuficiente. 33 por ciento en suficiente, 34.1 por ciento en el nivel bueno, y 7.4 por ciento alcanzaron el nivel de destacados. En el total de maestros, sumando los de Básica con los de Media Superior, la cifra global nos dice que el 15.3 por ciento resultaron en el nivel más bajo. 36.2 por ciento en el segundo, o sea, suficiente.  40.5 por ciento en el nivel bueno y 7.4 se consideran destacados.

Hasta ahora, las evaluaciones a docentes eran opcionales: si no querías ser profesor, no entrabas a un concurso por una plaza.  Si no querías mejorar de plaza, no acudías a la evaluación para promoción. Pero de la de desempeño no te puedes escapar si quieres seguir trabajando.

Estas cifras darán pie a muchos análisis. Hay muchas calabazas que se tendrán que acomodar en la carreta. Aprender de la experiencia y mejorar. Recordemos que faltan muchos maestros por evaluar.

Surgen muchas preguntas, plantearé algunas: Si los docentes, en un 80 por ciento van de suficiente a bueno, ¿por qué dos terceras partes de los alumnos están en insuficiente, en el nivel más bajo?, ¿Cómo podemos cerrar esas brechas? En otras palabras, ¿cómo mejoramos la Calidad de la Educación?  La evaluación sólo vale en función de las mejoras que de ella se puedan desprender.

A mí me queda claro que también tendrá que ser a través del reconocimiento a la labor docente.

Nadie gana una guerra denostando a sus soldados.