El México real está del otro lado de los medios convencionales
Por Luis Repper Jaramillo*
Dice el refrán popular “piensa mal y acertarás”, y viene a colación porque de repente una sucesión de hechos en el país llamó la atención, distrajo, creó una cortina de humo, desvió la atención de la sociedad sobre los verdaderos problemas de la población que impactan en su bolsillo, su boca, su seguridad, su tranquilidad y su ingreso (desempleo).
Hay algunos “líderes de opinión” que arrajatabla defienden –en su Columna o espacio radiofónico- las acciones federales que evitan que el pueblo conozca la realidad del país, creen que su opinión es la verdad absoluta y quitan a la gente su auténtico derecho a saber la verdad.
Pero en fin, así fue, así es y así será ese “líder de opinión” mientras su partido mantenga el poder.
Uno de los temas que trae desorientada, confundida a la opinión pública es el debate o decisión de permitir, autorizar, despenalizar la siembra, cosecha y consumo domiciliario y personal de la marihuana, que según dicen los que comulgan con ello, si es con fines terapéuticos, curativos, no hay problema, como lo asegurara Miguel Ángel Mancera, “la capital está lista para echar a andar un esquema que permita el uso con fines medicinales. A mí, se me hace que cada vez más se ha venido analizando en el tema, los efectos curativos; es decir, en la parte médica no tendríamos ningún obstáculo para que se pudiera trabajar”
Y para hacer más evidente este asunto, como distractor nacional, la Suprema Corte de Justicia de la Nación, que debatiría la permisibilidad de sembrar y cosechar en el hogar una “plantita de mota”, se echó para atrás (lo haría el miércoles 28 de octubre), y pospuso la sesión para el 4 de noviembre. Más días para alargar incertidumbre y ocultamiento de los golpes que preparan los diputados y senadores federales del paquete fiscal y aumento de precios e impuestos para 2016, como la gasolina, refrescos, predial, agua, etc.
Los Ministros de la Corte juegan su parte en este protocolo oficial para no permitir que la gente se entere de la carga impositiva que depara el próximo año, entre otras cosas.
Qué temas desvían la atención: la búsqueda de El Chapo, la construcción de los nuevos edificios del INE (innecesarios), la anulación de las alecciones en Colima, la llegada del PRI al gobierno de Guerrero, la lucha fratricida de la SEP contra la CNTE; el descuento por no trabajar (por marchas, mítines, plantones, acarreos, etc.) a maestros de Oaxaca. En la Ciudad de México, el asunto de la marihuana, la reapertura de 5 de las 11 estaciones de la Línea 12 del Metro, los paros de trabajadores de varias delegaciones políticas por falta de pago, el Gran Premio de México de la Fórmula 1, y no olvidar que la naturaleza también colaboró, con la presencia del Huracán “Patricia” que golpeó Colima, Jalisco, Nayarit.
De que tiene que enterarse la población, los consumidores de gasolina y diesel… Bueno de que aunque la Secretaría de Hacienda, jure y perjure que no habrá aumento al precio de los combustibles en 2016, lo cierto es que asegura que sólo habrá un impuesto fijo igual al promedio esperado para este año, es decir, y aquí está la “verdad a medias” de la dependencia: los actuales precios de las gasolinas estarán vigentes hasta el 31 de diciembre de 2015, por lo que al iniciar el nuevo año se fijará –así lo aprobaron los diputados federales- un impuesto para todo 2016 “de acuerdo a la inflación y al promedio esperado por las tarifas internacionales”; ¿entonces los más de 4 pesos por litro que se dejó saber en San Lázaro, es medio mentira y medio verdad?. Urgía pues un distractor para enredar a la gente ¿no?
Y rematan la “verdad a medias” al decir “que como parte del proceso de liberalización del mercado de combustibles previsto para 2018, se propone que los precios de las gasolinas vayan moviéndose gradualmente (al alza desde luego), al pasar de un impuesto variable a uno fijo, y se muevan de acuerdo con los precios internacionales”.
Los desenmascaró el Senador del PAN, por el Estado de Sonora, Francisco Búrquez Valenzuela, “el próximo año el gobierno federal continuará aplicando el IEPS de cuatro pesos al precio de las gasolinas e, incluso, lo va a oficializar, por lo que no habrá ninguna disminución en los precios de los combustibles” Verdad absoluta. Esto es lo que debe saber la población.
También tiene que saber que el precio de los refrescos, el líquido que más se consume en el país; es parte de la dieta del mexicano, más que la leche, sufrirá incremento de un peso por litro, bajo el peregrino argumento de que contiene muchas calorías, o demasiada azúcar y pretenden castigar a los consumidores “para no engordar”.
Un dato para conocer el golpe oficial a los bebedores de gaseosas. En México el consumo per capita de refresco es de 137 litros al año, que en comparación con el de leche es de sólo 54 litros por persona.
Entonces, el golpe fiscal contra los tomadores de refrescos es tremendo, pues un peso por litro, en bebidas que contengan más de 5 gramos de endulzante por litro, mermará el bolsillo del consumidor o de plano dejará de comprarlo, en detrimento de la industria y de las fuentes de trabajo que ésta genera.
De qué más se tiene que enterar los mexicanos, escondido en un distractor, pues que los diputados para 2016, autorizaron ajustar el tipo de cambio, es decir el peso frente al dólar de 15.90 a 16.40, lo que provocará inflación desde inicio de año, por la variación de la divisa a la alza.
Otros “detalles” que alejaron a los mexicanos de asimilar y calificar la crisis económica, social, laboral y de inseguridad que correo a la nación fueron la detención por elementos de la PGR, de 4 maestros de Oaxaca, líderes de la CNTE, a quienes la abogada de la nación, a través de un juez, finca varios delitos federales y son llevados al penal de mínima seguridad El Altiplano, (de donde se fugó El Chapo Guzmán), para seguirles juicio por la toma violenta de la Junta Distrital Electoral en Tehuantepec, asalto a instalaciones estratégicas de Petróleos Mexicanos, como la refinería Antonio Dovalí en Salina Cruz y el Centro de Distribución y Almacenamiento “El Tule”, en la capital del estado
También se les acusa de vandalismo contra instalaciones de la Octava Región Militar en Oaxaca y el robo de 10 mil libros de texto gratuito, propiedad de la Secretaría de Educación Pública.
En esto tiene razón y justificación el Estado, pues estos malandrines son delincuentes y no maestros, los detenidos –hasta ahora- son: Juan Carlos Orozco Matus, Othón Nazariega Segura, Efraín Picazo Pérez y Roberto Abel Jiménez, qué paguen por lo que han hecho.
Tarde que temprano, así se cree una cortina de humo, una desviación con hechos mediáticos, legales, deportivos, etc. la gente sabe, porque lo padece, que las cosas no van bien en el país, que el paquete fiscal 2016 será un golpe severo a la micro economía familiar, que el desempleo, la inseguridad, los exponenciales índices de pobreza se agudizan y que el “pan y circo”, son la cosa nuestra de cada día.
Los atribulados mexicanos no ven la suya y para rematarlos los “distractores” son comidilla diaria. Su alternativa para informarse de la realidad es recurrir, sintonizar, decidirse por los espacios informativos no convencionales, no los de grandes campañas publicitarias en la pantalla chica, ya no creen en ellos.
En fin… así está el México real. Usted tiene la opción de enterarse en los medios confiables, serios, formales y no tan publicitados por la mercadotecnia empresarial.
*Miembro de la Academia Nacional de Periodistas de Radio y Televisión (ANPERT