- Polonia, Taiwán, Singapur, Corea, Finlandia, Alemania, son países que lograron las transformaciones porque se pusieron a trabajar en ellas. Los procesos electorales los usaron en favor y no en contra de las reformas necesarias. Nada que no podamos hacer en México.
/Teresa Ortuño Gurza/
Presidenta de Suma por la Educación A.C.
Polonia es un país que compartía algunas similitudes con México. Desde que la democracia surgió allá con movimientos como Solidaridad a fines de los 80’s, han realizado grandes transformaciones, y ahora nos van ganando en varios rubros. Hablemos del Educativo.
La prueba PISA se realiza con jóvenes de 15 años. El porcentaje promedio de adolescentes que alcanza los niveles 5 y 6 -bueno y excelente- en Matemáticas, es de 12.6 en los países de la OCDE. Polonia tiene al 16.7 por ciento de sus jóvenes en estos dos rangos. ¿Cuántos jóvenes mexicanos alcanzan bueno y excelente en Matemáticas?: 0.6. Sí. Apenas cruzamos la mitad del uno por ciento. Estados Unidos tiene al 8.8 de sus adolescentes en esa clasificación. Shanghai-China, al 55.4. Chile, al 1.6 y Brasil al 0.8%.
Debajo del nivel 2 -los de menor desempeño-, México tenía en 2003 al 66.9% de sus jóvenes, y Polonia al 25.6. En 2012 esas cifras mejoraron para ambos países, pues en México ya eran 54.7, lo cual da para hablar de logros. Sin embargo, los chavos polacos en esos nueve años pasaron a 14.4. En otras palabras, a Polonia le tomó nueve años que la mitad de sus adolescentes salieran de los niveles más bajos de rendimiento académico en Matemáticas. En ese mismo plazo, la quinta parte de los mexicanos abandonaron esa ominosa categoría.
Más que demostrado está que cada 100 puntos más que obtenemos en la prueba PISA, equivalen al talento que se traduce en 1% de incremento en el PIB per cápita. No es sólo presumir a nuestros chamacos. Es tener jóvenes que aportan al país. Es salir de pobres. Es crecimiento, desarrollo. Es ir a las grandes ligas.
¿Qué falta, pues, en México? Los gobiernos hacen sus esfuerzos. A distintos ritmos y con diferentes agendas. La sociedad también. Pero gana la presión política.
Y aunque ya pasaron los Reyes y el Santoclós, aquí les va la lista de pendientes, a ver si se toman, aunque sea, como propósitos de año nuevo.
Respecto a lo que ya se aprobó y es Ley Vigente, festejada, cacareada y con muchas esperanzas en ella, falta: A) darle vigencia al SIGE, Sistema de Información y Gestión Educativa. B) Que los 740 millones que gastamos en el Censo Educativo sirvan para que sólo se le pague a quien se le tenga que pagar. C) armonizar las Leyes estatales en las entidades que no han cumplido con ello.
No se ven los signos adecuados, no se mandan las señales de ello. Al contrario. De hecho, en el tema educativo es donde se refleja la mayor debilidad del Gobierno: Ayotzinapa, IPN, Oaxaca, Michoacán, etc., son temas políticos que tienen origen o pretexto en lo educativo. No vemos la mano de la autoridad como deseamos verla. Maestros cometen delitos para que la Ley de Educación no se cumpla, y lo hacen con total impunidad. El FONE, que se supone les pagará desde el centro a los profesores que hayan sido censados y se compruebe que trabajan, ya se pactó con los gobernadores, para que se pague igualito que antes. ¿Para qué sirvió el Censo?
Y aun faltan temas sin atender, sean Legislativos o de Política Pública. Los menciono a vuelo de pájaro:
A) Modelo Educativo. Foros regionales y nacional, y estamos en espera de que la autoridad nos presente los resultados.
B) Educación Normal. Sigue sin definición. La preparación de los profesores es clave.
C) Infraestructura y Financiamiento. ¿El Censo nos ayudará a orientar los recursos a las escuelas más necesitadas? ¿qué retos nos presenta en este terreno la creación de escuelas de tiempo completo? ¿Cuál es el rol de los Gobiernos Estatales en esta inversión?
D) Papel de los Padres de Familia y de la Sociedad Civil en la calidad de la Educación. ¿Todo es culpa o responsabilidad de las autoridades? ¿qué papel debe jugar la sociedad organizada en diferentes formas, y cuál es la apertura, la porosidad de los gobiernos, para actuar en conjunto?
E) La Educación Media Superior. ¿Cómo evitar la sangría de jóvenes que ya no entran a Media Superior o que desertan en este nivel? ¿Cómo adecuar los planes y programas de estudio para que sea pertinente? ¿Cómo brindar cobertura y calidad?
F) Educación Superior. Su vinculación con el sector productivo. Pertinencia. Nuevas carreras.
Legislación.
G) Violencia Escolar, que ahora ocupa un espacio importante en la opinión pública, y presenta retos complejos.
H) Evaluación, ¿cómo llevarla a cabo considerando todas las variables? ¿cómo se va a suplir a la prueba Enlace?
I) Estímulos a la calidad.
J) Democracia y Transparencia Sindical.
K) REVOES o Reconocimientos a la Validez Oficial de Estudios. Existen tantas ventanillas para acceder a ellos, que es una verdadera pachanga la existencia de escuelas «patito».
L) Certificación de Maestros.
M) Transformación de la Carrera Magisterial.
N) Servicio Social de los Estudiantes: cómo utilizar esta etapa de la vida para transformar para bien las condiciones de la comunidad, etc.
O) El enorme panorama que genera la adecuación de la Ley de Niños, Niñas y Adolescentes, en lo que a Educación se refiere.
P) La desaparición del FAEB y surgimiento del FONE, tema que quizá sea el más sensible para la opinión pública, porque representa el pago de la nómina magisterial.
No están enlistados en orden de importancia. Es una apretada síntesis de lo urgente para que ocurra lo bueno, si es en serio que deseamos mejorar en lo Educativo.
Tanto en lo ya aprobado como en la agenda pendiente, dejemos de pensar en que todos son temas de Gobierno. Cada uno de ellos da para un ensayo, ya no digamos para un comentario editorial como éste. Sin embargo, la mayor responsabilidad sí es de las autoridades.
Polonia, Taiwán, Singapur, Corea, Finlandia, Alemania, son países que lograron las transformaciones porque se pusieron a trabajar en ellas.
Los procesos electorales los usaron en favor y no en contra de las reformas necesarias. Nada que no podamos hacer en México.
La Reforma Educativa fue la primera que alcanzó el consenso político en este sexenio. Sin embargo, no vemos los signos que urge ver.
Es muy sencillo: le entramos o no