Playa del Carmen.- El ayuntamiento de Playa del Carmen impuso una multa de 70 mil salarios mínimos, es decir, alrededor de 4 millones 651 mil pesos, al hotel Paradisus de la firma española Meliá por remover vegetación protegida sin contar con los permisos correspondientes.
Lo anterior luego de fenecer el plazo de cinco días hábiles que la Dirección General de Ordenamiento Ambiental y Desarrollo Urbano de Solidaridad dio a los representantes del Hotel Paradisus para presentar las licencias o permisos que les permitieran la remoción de vegetación como manglar y palma chit, y éstos no exhibieran autorizaciones vigentes.
El director de la dependencia responsable, Eduardo Morentín Ocejo, detalló que tras vencer el término, el lunes pasado, la empresa presentó documentación con la que pretendió acreditar que contaba con los permisos para remover la vegetación, sin embargo, luego de la revisión técnica y jurídica de los documentos entregados, se determinó que éstos no cumplían con las formalidades pues requerían de permiso municipal para llevar a cabo la remoción vegetal.
La multa se aplicó por 50 mil salarios mínimos considerando que los hoteleros no tramitaron permisos municipales; más otros 20 mil salarios mínimos porque incurrieron en reincidencia, ya que tras aplicárseles una primera clausura, violentaron los sellos y continuaron con los trabajos de despalme de vegetación.
Morentín Ocejo precisó que, independientemente de la multa impuesta, hasta que no concluya el procedimiento administrativo municipal y el de la Profepa, el hotel Paradisus deberá abstenerse de realizar cualquier tipo de trabajo en la zona.
Aún resta que la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) concluya con la inspección de impacto ambiental y determine si la documentación con la que cuenta el hotel Paradisus le permitía remover vegetación considerada como protegida.
Cabe señalar que los hoteleros tienen la opción de interponer un recurso ante la determinación del ayuntamiento, tal como lo hiciera el otros centro de hospedaje depredador, Grand Coral, que a pesar de que se le impuso una multa por alrededor de 3 millones de pesos, recurrió la sanción de la autoridad municipal.
