El ataque de la FMT contra la Libertad de expresión
* Fernando Leopoldo Segal emprende demanda por “Discriminación”
POR MAURO FLORES LEDESMA
La ineptitud y la soberbia cuando se mezclan son dinamita pura.
La Federación Mexicana de Tenis, que encabeza Gastón Villegas Serralta a través del Director Nacional de Tenis, Fernando Leopoldo Segal Alem, emprendió una demanda penal contra quien esto escribe por el presunto delito de DISCRIMINACIÓN.
La querella fue presentada en la Fiscalía Desconcentrada en Coyoacán, Coordinación Territorial Coyoacán 2, dependiente de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal, bajo la averiguación previa FCY/COY-2T 1/01802/14-10.
Responderemos a la citada demanda en tiempo y forma, pero nos parece monstruoso que ciertos personajes del Consejo Directivo de la FMT estén más preocupados por acusar a quien les dice sus verdades, que por sacar del abismo al tenis de México.
Desde hace algunos meses hemos buscado abrir el caparazón de la FMT para que los tenistas, entrenadores, profesores, árbitros, padres de familia y todos los involucrados en el tenis de nuestro país se enteren de la realidad, esa que nunca se publica, la que nunca se dice, esa que siempre esconden porque no es agradable, pero forma parte de la vida política de nuestro deporte.
Además, el pasado lunes recibimos una carta de la ATDF (Asociación de Tenis del Distrito Federal) donde informan que mis servicios ya no son requeridos en la cobertura periodística de los eventos, torneos y actividades de esa asociación y que se lo comunicarán a los clubes afiliados. Todo debido a las presiones y cartas amenazantes de la FMT para que la ATDF me “vetara” como periodista, es decir tirar la piedra y esconder la mano.
Es increíble lo que sucede en el tenis mexicano. Parece que lo más importante es lo que menos atención tiene. Los tenistas son la materia prima y son ellos los que deben recibir la atención de los llamados federativos que para eso están en los puestos, para servir a los tenistas.
Fernando Segal ya hizo algo importante por el tenis mexicano: lo ha unido en su contra, pero dicen que no hay peor ciego que el que no quiere ver.
¿Y LA LIBERTAD DE EXPRESIÓN?
Ahora resulta que los “abogados” de la FMT buscan cualquier recoveco jurídico para tratar de callar a los medios de comunicación.
También les informamos que Leopoldo Segal buscó vía telefónica a nuestro director de la revista y sitio web Tennis Life, donde colaboramos desde hace varios años, para denostar nuestro trabajo. También les informamos oportunamente que dejó plantado al editor de la revista Tennis Life en español. Agustín Díaz de León, luego que se le había concedido el derecho de réplica… Absurdo, ¿no?
Es en verdad lamentable el papelón que está haciendo este sujeto en nuestro país. Vino a hacer un Programa Nacional de Tenis, pero falló, pues a 6 años de actividad no hay ningún resultado digno de resaltar.
¿Dónde queda la libertad de expresión?, ¿ahora resulta que los periodistas no podemos decir nada porque nos van a demandar? Pensemos un poco en los acontecimientos recientes en México ¿Ya se dieron cuenta de las severas críticas que el presidente Enrique Peña Nieto ha recibido en los medios de comunicación a raíz de los lamentables acontecimientos por los normalistas de Ayotzinapa?, ¿se imaginan que se dedicara a demandar a todos los que vierten sus críticas hacia él?… Es inaudito e inconcebible.
AGUAS CON EL PRESUPUESTO
Lo que sí sabemos es que la CONADE aumentó considerablemente el presupuesto para el tenis nacional, son cantidades que llaman la atención y que provienen de nuestros impuestos, así que solicitamos nuevamente que haya rendición de cuentas para tranquilidad de la familia tenística.
No queremos que nos vuelvan a hechizar con cifras mágicas ni de humo… el presidente de la FMT, Gastón Villegas y el Director Nacional de Tenis, Leopoldo Segal, tienen muchas cosas que aclarar.
Por lo pronto, estamos en la posición de no permitir este atentado a la libertad de expresión, procederemos conforme a derecho, con la firme convicción de que la verdad está de nuestro lado.
