Deducciones, el punto subrayado de la IP con legisladores
Se acabaron las vacaciones para el Banco de México
CEESP * BBVA Research *
Por Gerardo Flores Ledesma (*)
CIENTOS DE EMPRESARIOS del país se quejan constantemente de la evolución de la economía, del clima de negocios, de la inseguridad y la política fiscal, entre otros defectos de nuestro sistema político y de administración federal. La crítica constante o su cliente favorito es el gobierno en sus 3 niveles (federal, estatal y municipal). Hablan siempre de las necesidades para crecer y las urgencias de hacer cambios en distintos sectores. Incluso llegan a pedir certificaciones de empresas que siempre han cumplido con sus obligaciones ante el Fisco federal para no ser molestadas por la autoridad, ante la proliferación de miles de negocios informales y fantasmas. Sin embargo, poco hablan de hacer un censo entre ellos mismos para definir quiénes de sus empresarios o socios son respetados y respetables. Eso daría una señal de certidumbre a los mexicanos y ayudarían en forma importante a limpiar el circuito financiero del país de acciones como lavado de dinero, mediante la compra de grandes extensiones de tierra, ranchos, hoteles, complejos turísticos, inmobiliarias, líneas de transporte, intermediarios financieros bancarios y no bancarios, regulados y no regulados, entre otros «negocios». El reciente caso del «empresario» Germán Goyeneche Ortega, queretano con inversiones inmobiliarias en San Miguel de Allende, Guanajuato, e identificado como operador financiero del capo Héctor Beltrán Leyva, recientemente detenido en ese municipio, y sus vínculos con el candidato panista para ese ayuntamiento, Ricardo Villarreal García, y la presunción de su militancia en el Partido Verde Ecologista de México (PVEM), sólo nos lleva a concluir que los empresarios del país, no están haciendo nada por ayudar a limpiar a la nación de una plaga que tienen sus origenes en el narcotráfico y cuyas redes se extienden en los partidos políticos, en los bancos, en las casas de bolsas, en los grupos empresariales, en las listas de candidatos a puestos de elección popular y en organizaciones civiles y sociales. Para los miembros del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), que encabeza Gerardo Gutiérrez Candiani, no sería difícil hacer un censo que certificara a los empresarios limpios y honestos de México, y que dejara en la duda a quienes surgen de la noche a la mañana como dueños de miles de negocios de todos los tamaños en el país. Ellos saben, sin temor a equivocarme, quiénes de los hombres de negocios que hay en los miles de municipios que conforman a nuestra nación, no podrían demostrar el origen de sus recursos, quiénes no se dedican al comercio limpio y transparente o a la industria sin fachadas. Ellos cuentan con cientos de redes de información desde sus centros empresariales, cámaras de comercio, cámaras industriales, asociaciones empresariales y otros organismos con influencia en sus zonas de operación para conformar un censo que permitiera a la autoridad focalizar su radio de acción y facilitar la detención de hampones. Ellos saben quiénes son los empresarios-hampones cuya fuente de riqueza no es lícita o raya en la apariencia, como en muchas colonias se sabe quién es narcomenudista o se dedica a actividades ilícitas. Si los auténticos empresarios, los que trabajan diariamente por el progreso nacional no hacen nada, sólo serán cómplices y pedigüeños de un sistema abocado en sos propias prioridades.
Ahí les deo, la conseja, la moraleja, la frase pues: ¡En la casa del herrero, azadón de palo!
EL SECTOR PRIVADO no quitará el dedo del renglón para conseguir que los legisladores entiendan la necesidad de crear un plan de incentivos fiscales y financieros que alienten la reactivación de la economía y terminen de una vez por todas con la parálisis que se observa en el mercado interno. En todas las reuniones que han tenido los presidentes de organismos empresariales con Silvano Aureoles y con Miguel Barbosa, líderes de las Cámaras de Dipitados y Senadores, respectivamente, está presente la urgencia de devolver a las personas físicas y trabajadores el 100% de deducibilidad, vía sus patrones o acreedores, en prestaciones sociales, vales de depensa, gastos personales importantes como ropa, médicos, dentales, funerarios, etc, que fueron acotados en 2014, y a las empresas la posibilidad de que les devulevan rápidamente el IVA, sobre todo en inversiones, reinversiones, creación de empleo, capacitación, pago de IVA, a proveedores aunque la empresa opere con tasa cero o esté exenta del pago de ese gravamen por ser del ramo alimenticio, acuicola o agropecuario.
DESDE LA CRISIS inmboliaria de 2008, los bancos centrales en el mundo se ocuparon de usar sus reservas internacionales para evitar contagios en el mercado interno, el consumo, las tasas de interés, su tipo de cambio, quebrantos de sus bancos, endeudamientos excesivos de su población o quiebra total del país, como se vivió en Irlanda, Grecia, Italia, España y otras naciones que estuvieron al borde del abismo. Esa acción de la Reserva Federal y del Banco Central Europeo, principalmente, de inyectar dinero a la economía para dinamizarla, no se puede hacer en México porque la Constitución y la Ley Orgánica del Banco de México lo impiden. Sin embargo, el agua le llegó a los aparejos al Banxico, que encabeza Agustín Carstens, porque aunque su misión primordial es mantener un nivel adecuado de los precios para evitar que la inflación asfixie a la población y cree perjuicios severos o perversos al bolsillo de los trabajadores y sus familias, como tareas adicionales tiene mantener un adecuado nivel del tipo de cambio y de las tasas de interés. La paridad peso-dólar se puede salir de control si el Banxico no interviene con más fuerza, independientemente de sus mecanismos tradicionales como la subasta de dólares o el aumento en tasas de interés domésticas, como el Cete y los Udibonos, para alentar las inversiones en pesos. Se acabaron las vacaciones en el instituto central. Nadar de muertito, a ver qué dictan las fuerzas del mercado, ya no vale en estos momentos, pues el tipo de cambio y los réditos en valores gubernamentales se han presionado en forma inusitada. Si las reservas internacionales, que nos cuestan anualmente más de mil 500 millones de dólares tenerlas y mantenerlas, no sirven para reactivar a la economía, tendrán que usarse para defendernos de la especulación y los choques del exterior.
PUNTOS Y LINEAS
OTRA VEZ, el Centro de Estudios Económicos del Sector Pirvado (CEESP), que dirige Luis Foncerrada Pascal, subrayó que la inseguridad en el país puede poner en riesgo a las inversiones nacionales y extranjeras, haya o no pronto aterrizaje de las reformas estructurales. En su más reciente estudio el CEESP, con base en los resultados de la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública (ENVIPE) que recientemente dio a conocer el INEGI, la población de 18 años y más considera a la inseguridad como el principal problema que aqueja su comunidad. El tema de la inseguridad en el país ha seguido ganando terreno. De acuerdo con el reporte, 33.9% de los hogares del país tuvo al menos una víctima de delito durante el 2013, porcentaje que refleja un constante aumento en los últimos tres años. Esto significó que durante el año pasado hubo 22.5 millones de víctimas mayores de 18 años tras un total de 33.1 millones de delitos. También se destaca que la cifra negra durante el 2013 (delitos cometidos, en los cuales no hubo denuncia o no se inició averiguación previa) se elevó a 93.8%, casi dos puntos porcentuales por arriba del dato previo… Para esta semana se espera el dato de Producción Industrial de agosto, que de acuerdo con BBVA Research podría aumentar a una tasa anual de 2.2%. Si tal pronóstico se cumple, podremos decir que la industria en México se receupera en forma lenta, pero consistentemente…Expertos en economía creen que la expectativa del Producto Interno Bruto (PIB) para 2014 ya detuvo su caída en septiembre y se ubicó en 2.47% anual. Para 2015 se ajustó a la baja hasta 3.83%.
(*) Periodista
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